Para mí está muy claro:
por mi último deseo:
“Si de muerte fueras reo,
¿de cenar, que pedirías?”
“Aunque ofrezcan ambrosía,
no he de perder la cabeza”,
respondí con gran franqueza,
“querré una cosa sencilla:
un plato de ensaladilla
y una caña de cerveza.”
A mi amiga Nuria del Peso le apetecería otra cosa:
Me pregunto yo
también
qué es lo que
tomaría
si llegado el
fatal día
tuviera que
elegir bien
el bocado más
fetén.
Probablemente
pidiera
a la Parca
puñetera
un plato de buen
jamón,
de esos que
hacen montón,
y un tintito de
Ribera.
Escribidlo en décimas y podréis participar en esta entrada.
Otra amiga, Angie, me ha dicho cuál sería su último deseo gastronómico:
“Díme, Angie, ¿qué quieres tú?”
pregunté a mi compañera,
“para esa cena postrera,
¿cuál sería tu menú?”
“Quiero un plato de Perú,
aunque yo soy madrileña,
se llama causa limeña,
se llama causa limeña,
y es muy fino y delicado,
con pisco sour regado”,
me contestó muy risueña.
En caso de morir quiero
ResponderEliminarUn menú bien suculento
Yo huyo del esperpento
Y del carro manicero
Es mi deseo sincero
Un gran plato de lasaña
Con gusto pero sin saña
Sin importar maridaje
Mi esperado brebaje?
Una birra en media caña
¡Estupendo, Paola! ¡Muchas gracias!
ResponderEliminarSi yo me fuera a morir,
ResponderEliminar-¡no haga Dios tal hazaña,
ni Lucifer mala maña!-,
me gustaría al partir
que mis labios recordaran,
aquel pincho popular,
en origen circular,
que tantas veces cataran:
¡esa tortilla española,
que se merece una ola!
Hummm, veo que cunde el ejemplo, ¡qué bien! Muchas gracias, anónimo comunicante.
ResponderEliminarSi la muerte saca el ojo
ResponderEliminarY me mira con premura.
Antes de darme tortura
calma mi sed con tintorrro.
Y para llevarme al morro
una fuente de fritura,
embutidos sin mesura,
paté, perdiz y conejo
que mi colesterol espeso
esta vez no me lo quita.
Un saludo Estrellita !!
¡Muchas gracias, qué enrollado! Al final nos va a salir un cancionero del corredor de la muerte, jejeje
ResponderEliminarSi un día para mi mal
ResponderEliminarViene a buscarme la Parca
No empujéis al mar mi barca,
!Dadle chorizo con pan!
Y a mí, el pan con pisto
Y luego sigo mi viaje
Que con tanto peregrinaje
A la mala mujer despisto
Que no quisiera morir
Sin comer mango en Brasil